Esta noche está cargada de Magia. Materiales necesarios: miel en un frasco con tapa de metal, vela roja, aceite de rosa u otro aceite específico para el amor, alguna pertenencia de la persona que quieres amarrar con miel en caso de que puedas conseguir alguna, papel, bolígrafo con tinta roja y una cuchara.
Este tipo de ritual de AMOR ETERNO pertenece a la Alta Magia , teniendo las siguientes ventajas: opera con ayuda de las fuerzas elementales superiores, fuerzas angélicas ó santos (a gusto del solicitante), y por lo tanto es óptimo para resolver su relación problemas amorosos; al ser un Amarre de Amor Eterno y realizado con Magia Blanca, es indetectable (no puede ser descubierto por medio de lectura de cartas ni otro método adivinatorio) y dado su poder, anula todo tipo de trabajo anterior ó hechizos de amor amarres realizados con anterioridad por terceros.
Amarres y conjuros de amor gratis. En luna creciente debes cortarte un pequeño mechón de pelo e introducir en el saquito, un pedacito de tu ropa interior, un pequeño capucho de rosa roja, un pedazo de cartulina con tu nombre y con el de la persona que amas, imprégnalo en esencia de canela y déjalo en la calle bajo el influjo de la luz de la luna durante tres noches.
A lo mejor si el año pasado empezaste el año con una prenda de ropa interior roja , has experimentado por ti misma si funciona no, pero lo cierto es que se dicen que si llevas una prenda de ropa interior roja en el cambio de año, tendrás suerte en el amor al año siguiente.
Como otros tantos ritos paganos, la celebración del solsticio de verano -21 de junio- ha llegado hasta nuestros días revestida con el halo de una festividad religiosa que, sin embargo, ha sabido mantener mejor que ninguna otra el culto ancestral al fuego.
Por mucho tiempo esas personas fueron respetadas, ya que eran las únicas capaces de curar el cuerpo y el alma, sin embargo con el paso de los años surgió mucha duda y prejuicio sobre cómo los deseos eran concedidos, y así, este tipo de practicantes fueron perseguidos, torturados e incluso asesinados bajo la acusación de trabajar con fuerzas malignas, aunque ninguno de esos acusadores tuvo pruebas concluyentes.